Muchos padres no les conceden la debida importancia a los dientes de leche de los más pequeños, sin embargo, éstos acompañarán a los niños durante unos cuantos años, y pueden sufrir caries y otras enfermedades dentales.
De este modo conviene cuidarlos desde que empiezan a salir además se les inculcan desde pequeños una correcta salud bucodental.
¿Qué son los dientes de leche?
Los dientes de leche son 20 dientes temporales que están dispuestos en las dos arcadas, superior e inferior. Entre todos, se distinguen ocho incisivos, cuatro caninos y ocho molares
A diferencia de los dientes definitivos que son 32 dientes, 8 incisivos, 4 caninos, 8 premolares y 12 molares, de los cuales, 4 son conocidos como muelas del juicio.
¿Desde cuándo tenemos que preocuparnos de la higiene bucal de los niños?
Hay que vigilar y detectar posibles problemas desde que sale el primer diente.
En cuanto a la higiene, conviene limpiarse los dientes, eso sí, sin pasta y con una gasa húmeda. De esta forma, el niño va viéndolo como una rutina al estilo del baño.
¿Cómo hay que lavar los dientes?
Hasta los 2 años, hay que utilizar una gasa húmeda o un cepillo de dientes de la medida adecuada. Hay que lavarlo sin pasta de dientes.
A partir de los 2 años ya se puede utilizar pastas de dientes, eso sí, siempre bajo la supervisión de un adulto hasta los 10 años de edad.
Se recomienda la técnica de «bass» modificada, que consiste en movimientos en circulo entre diente y encía.
Además a partir de los 3 años o cuando ya hay dentición temporal completa, conviene acudir por primera vez al odontopediatra.
¿Hemos de tener cuidado con algunos alimentos?
Sí, especialmente los alimentos dulces: chocolate, golosinas, ketchup o refrescos dulces.
¿Si sale caries en los dientes de leche hay que tratarlo?
Según estudios el 75% de los menores con este problema no recibe tratamiento. Sin embargo hemos de advertir que la caries es una infección y que si los dientes definitivos salen y los de leche estaban infectados, los dientes definitivos se van a infectar también, generando problemas serios.
Por lo tanto, la respuesta es que sí, hay que tratar la caries de los dientes de leche.
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