La única forma que tienen los bebés recién nacidos para comunicarse es mediante el llanto. De hecho es normal que durante los 2 o 3 primeros meses de vida los bebés lloren más de 1 hora al día, ya que eso forma parte de su proceso de adaptación al nuevo entorno de vida y lejos de la comodidad del útero materno.
Que llore no tienen porqué significar que esté recibiendo un cuidado inadecuado, pero para muchas madres primerizas estos sollozos puede llegar a ser insoportables.
Préstale atención, los llantos son diferentes en función de lo que le ocurra a tu bebé. Puedes llegar a entenderle y saber qué le ocurre exactamente según cómo llora:
- Hambre: es una de las primeras cosas que se ha de comprobar. Puede que dándole de comer al principio no le calma, pero si tiene ganas, déjale comer.
- Frio o calor: Un indicio de si tiene frio o calor es tocándole las extremidades, si están fríos o calientes, puede ser indicios de que no está cómodo con la cantidad de ropa que lleva o la temperatura del ambiente. Los bebés son muy sensibles a la temperatura, y generalmente tiene más frio que los mayores, eso sí, hay que evitar siempre que suden.
- Cansancio: Lejos de lo que podríamos creer, si un bebé está muy cansado, le cuesta mucho más dormir, así que cógele en brazos, llévale a una habituación tranquila e intale calmarlo. Quizás un poco de música relajante le ayude a calmarse sobre todo si es la misma música que le has puesto durante el embarazo.
- Mimos: Los bebés no están acostumbrados a estar sólos. Durante el embarazo siempre ha tenido contacto de su madre, y tiene un sentimiento de abandono si no le das suficientes mimos.
- Incomodidad por la ropa: Ropa estrecha, una etiqueta puntiaguda o incluso un tejido incómodo o incluso alérgico.
- Enfermedad: conviene tomar la temperatura del bebé con frecuencia, las defensas del bebé aún no funciona del todo bien.
- Pañal sucio: Algunos bebés son más sensibles, fundamentalmente si tiene el culito irritado. En este último caso, hay que tener especial cuidado, muchos cambios de pañal puede irritarle aún más. Existen algunas cremas que puede aliviar este problema como Bepanthol
- Cólicos: es la acumulación de gases en el sistema digestivo de los bebés que aún son inmaduros. Les puede causar dolor y provocarles lloros inconsolables incluso durante horas. Intenta abrazarle, ponerle la mano en la tripita o incluso dale unos ligeros masajes «I Love You»: haz movimientos (I L U) invertida sobre la tripa del bebé con las manos untados en aceite de almendras.
Y lo más importante, hay que tener paciencia y tened la certeza de que todo esto pasará, ya que los bebés no tardan mucho en hacerse entender sin necesidad de llorar.
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